Declaraciones de Pepito

Pepito siempre se ha conocido por las cosas que dice. Sin embargo, en el 2017 esta tirilla adquirió aún más notoriedad no por nuestro contenido sino por los esfuerzos del gobierno en silenciarla. Ese afán eventualmente se tradujo en la salida del periódico que le dio la oportunidad a Pepito de nacer. Lo que tal vez pasaría como un acto de censura de los que nadie se entera, se convirtió inesperadamente en tema obligado de una nación. El pueblo se desbordó en cariño y solidaridad hacia un niño de siete años que, aunque no existe más allá del papel, sus ocurrencias e historias hacen que se materialice en el corazón del colectivo. Entre las muchas muestras de solidaridad que recibimos, hubo una que perduró en el tiempo. La amistad entre Pepito y NotiCel. Todo comenzó con una entrevista. El pequeño medio digital cumplía su función de reportar la noticia. En esa conversación conocimos a Oscar J. Serrano y Jonathan Lebrón Ayala. Luego de contarles nuestra historia nos contaron la de la creación del espacio noticioso. La conexión fue inmediata. Una vez terminada la entrevista Pepito siguió su rumbo por las redes sociales, mientras estudiamos propuestas de diferentes medios que se interesaron en el cómic. Entonces llegó María. Con el país en pedazos y lo medios en una situación difícil el coqueteo por la atención de Pepito se fue literalmente con el viento. Sin embargo, siempre recibimos mensajes de aliento a continuar publicando, a continuar denunciando, a continuar contando nuestra verdad. Esos mensajes venían de nuestros amigos en Noticel. Eventualmente la solidaridad entre publicaciones se convirtió en una colaboración.

En Noticel Pepito gozó de algo que nunca había visto. Una libertad completa editorial. Un respeto a la voz del personaje y los temas que decide tocar. Nos llenó de orgullo escribir para un medio con un compromiso total hacia el balance y pluralidad de voces. Esta libertad nos ayudó a conseguir hasta un premio del Overseas Press Club para Noticel. En días recientes, ha trascendido la venta del periódico digital a una nueva gerencia. Muchas personas se nos han acercado preocupados por el futuro de Pepito. Esperando comunicación de la nueva gerencia, decidimos no abordar el tema. Esta semana el periódico lanzó su lista de nuevos columnistas. La misma no fue del agrado de Pepito. No solo obvia el análisis y perspectiva de las mujeres, cediendo solo 2 espacios de entre 22 columnistas a féminas, sino que pone en la misma nómina que Pepito a integrantes del chat de la pasada administración. Pepito no se podía quedar callado. Si bien se requiere valentía para enfrentar al enemigo, se necesita mucho más cuando decides enfrentar a un amigo. El instinto de protección o hasta el miedo de perderlos puede ser un acto de autocensura brutal. Pero si conocen a nuestro amiguito saben que el miedo lo dejamos debajo de la cama con el Cuco. Pepito envío su opinión a la nueva dirección de Noticel. Reconocemos que valientemente la publicaron. Junto con la publicación se nos notificó la salida del personaje de periódico en un mes. Además, se detallaron reservas importantes de carácter editorial en donde la tirilla no gozaría de la libertad que hasta entonces se le había concedido. Por tal razón hemos decidido que dicha tirilla sea la última publicada en Noticel. Si existe una cosa por la que queremos que recuerden el paso de Pepito por este espacio noticioso, es que ante todo publicar la verdad es un acto de valentía. En un mundo que ha perdido la capacidad de autocriticarse, la risa supone un bálsamo que apague el calor de los egos. Para un medio que empieza una nueva etapa, que la última publicación de Pepito sea un espejo hacía si misma es el mejor regalo que le podemos dejar. Recuerden que entre risas se cuentan mejor las verdades.