La Campechada, evento que ha sufrido cambios objetables y recién se redujeron sus días ante la muerte de un exgobernador se perfila en futuro como un evento tóxico para los artistas

Arte Cultura y Entretenimiento | Redacción/ Escrito por Javier Martínez
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La Campechada, un evento popular que rendía homenaje a los artistas visuales de Puerto Rico fue transformada y relocalizada fuera del área metropolitana desde el año 2017 cuando entró el nuevo director del Instituto de Cultura.

La decisión de Carlos Ruiz Cortés en *dedicar La Campechada a educadores y músicos así como de moverla para Mayagüez y Ponce no ha contado con el aval de muchos artistas que veían en este evento una oportunidad única de hacer visible la importancia de las artes visuales asi como la valía de los artistas plásticos de nuestro país.

Como si fuera poco ese cambio drástico ( el cual podríamos tolerar temporalmente ) si se reconociera su gestación inicial relacionada a las Artes plásticas y se aclarara que se regresa pronto a sus orígenes pues tal vez se le habría dado un tiempo de gracia para explorar estos homenajes recientes, pero entonces planeas un evento por casi un año , haces compromisos, contratos, promoción y cuando surge un suceso como la muerte de Rafael Hernández Colón en vez de pensar en La Campechada como un evento cultural serio lo ves como una fiesta y no crees que con ella se puede rendir homenaje a un Ponceño que fue importante para muchos puertorriqueños, la vez como algo no solemne y decides cortarles días, restringiendo tan solo a un día sus presentaciones para luego salir a decir que fue un éxito, cono pues claro que lo va a ser, como lo habría sido si hubiera corrido el circuito completo.

No se le hace ningún bien a la cultura decir que La Campechada fue un evento exitoso en los medios ( siempre lo ha sido) tal vez otro sinonimo seria mas apropiado ante el atropello pues en su arbitraria decisión de cercenar días a dejado sin taller a muchos artistas, músicos y teatreros, sin mencionar a individuos comerciantes que perdieron ( así como los artistas ) de generar ingresos y labor cultural por dos días de actividad que no pueden agruparse en tan solo un dia.

Herida de muerte digo, porque que artista, perfomero, musico o individuo de negocios confiara que se cumpliaran los compromisos en una proxima ocasion, todos esos que no pudieron participar por el cierre de días deben estar sacando números para ver cómo pagan las deudas contraídas y que hacen con los objetos culturales creados con identidad de la ocasión. Y si el próximo año sucede un evento «extraordinario» actuarán igual, restando días de actividad cultural?

Nosotros en Autogiro realizamos una encuesta ( 244 a favor de dejar el evento íntegro y 84 en contra) tan pronto nos enteramos de los recortes de presentaciones y etiquetamos al Instituto de Cultura y al evento La Campechada para que pudieran ver el pulso de opinión y a pocas horas se podía ver que tan solo 1/3 de los participantes apoyaban cortarle días, la mayoría expresaba que se dejará intacta y se le rindiera homenaje al político fallecido a través del evento, algunos indicaron que se moviera para otro fin de semana, lo cual creaba otras complicaciones un poco parecidas, pienso, a lo de quitar dias, insisto y el público lo reafirmo votando que fue una mala decisión.

Decisión que ha llevado en estos momentos a un detrimento de la marca La Campechada por esta y las anteriores decisiones* y a una probable desaparición o disolución del evento cultural.

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